
Llueve, de vuelta a casa me he calado hasta los huesos, después de ocupar la mañana en una clase con veinte niños conversando sobre "Hábitos Saludables"
Proyecto al que me han invitado a participar, ha sido una agradable experiencia si me vuelven a invitar participaré encantada.
Este fin de semana ha estado mi amiga Ana, angelical donde las haya.
En la terraza ha florecido una cala maravillosa, un año más el milagro de la primavera. Y las hortensias incipientes prometen brotar con todo su explendor.